Blog

“Nuevos comienzos, nuevas oportunidades”

De nuevo nuestra compañera Maite Schneider, tutora de 3º de primaria, comparte una reflexión que todos podríamos firmar. Os dejamos el texto completo:

NEW BEGININGS, NEW OPPORTUNITIES .  

¿Comenzamos otra vez?

Yo soy persona de “comienzos”, porque en cada comienzo veo claramente nuevas oportunidades. Retos nuevos, ilusiones nuevas, caminos sin recorrer, partidas sin jugar aún que, por supuesto, se pueden ganar. Y por eso, me gusta más estrenar un año que terminarlo. Prefiero el primer sorbo de vino al último, prefiero el aperitivo a los postres, prefiero el saludo a la despedida.

Me encanta abrir por primera vez un nuevo libro y paladear los primeros capítulos. Me gusta estrenar un vestido nada más comprarlo, elegir el primer bombón de una caja recién abierta y abrir las puertas a amistades nuevas, porque entiendo que la capacidad del ser humano de generar amor es mucho más grande de lo que creemos. En definitiva, comenzar, siempre comenzar.

Y todo esto, ¿Qué tiene que ver con el cole?, ¿Qué tiene que ver con la educación?

Nuestra tarea de educar es para mí tan mágica como la sensación que nos produce abrir un paquete regalo, tan nueva cada día como es nuevo cada amanecer, que por muchas veces que lo hayas contemplado, siempre hay colores nuevos, matices de luz que no habías visto y que, en definitiva, lo convierten en un cuadro distinto.

Cada niño, cada niña es una obra de arte por descubrir cada día, una paleta de colores por estrenar y por eso, cuando contemplas tu tarea educativa como un continuo comienzo que cada año es único y distinto, la ilusión no se te gasta por más años que pasen por ti.

Fuera los miedos. Comenzar es arriesgar, es probar, es cambiar, es borrar, es equivocarse y avanzar.

No hay limitaciones cuando hay ganas de aprender cada día. La ilusión es la fuerza de empuje que hace posible superar los miedos y los contratiempos y el trabajo en equipo el que consigue que los objetivos se alcancen y los obstáculos parezcan más pequeños y se superen con facilidad.

De este modo, cada día puede empezar dando luz a nuevas situaciones de enseñanza y de aprendizaje y cada situación de aprendizaje redundará en nuevos proyectos y nuevos logros.

Quiero poner punto y seguido a esta pequeña carta- reflexión, recordando que no hay un día igual a otro día, que no hay un niño igual a otro y que a veces el éxito de un día radica en cambiar el enfoque, la perspectiva o el ángulo de nuestra mirada, entendiendo que, en este camino del Aprendizaje, todo, todo, SUMA.

Feliz Año Nuevo.

El 2023 está aún por estrenar. ¿Cuántas oportunidades vas a aprovechar para descubrirte y descubrir todo lo que encierra cada momento de vida que esta profesión nos regala?

Maite Schneider.